Predicciones para la Segunda Mitad del 2014...
En las predicciones para el 2014 escribí que la segunda
mitad del 2014 sería muy diferente de la primera y ese período comienza el 1ro
de julio. Es muy apropiado que el mes comience con Mercurio directo y
durante el mes Marte y Saturno terminarán ambos sus largos retrógrados,
entonces cuatro planetas cambiarán de signo. Esa es mucha actividad para un mes
pero estamos listos para ello, ¿no?
Julio abrirá las puertas al cambio, liberando mucha energía
estancada e invitándonos a avanzar hacia los cambios y la transformación por la
que hemos estado esperando desde hace mucho tiempo. Ese momento que hemos
estado esperando y deseando ya está aquí ahora. Todo lo que tenemos que hacer
es decidir lo que vamos a hacer con la energía.
La diferencia entre cambio y transformación a un nivel
energético, es profunda. Con el cambio simplemente sustituimos una cosa por la
otra, de la misma forma en que nos cambiamos diariamente la ropa interior. Con
la transformación recibimos una renovación total para que aun las personas que
nos conocen bien ya no nos reconozcan. Tenemos la oportunidad para la transformación
ahora - ¿estamos dispuestos a aceptarla y convertirnos en una nueva versión de
nosotros mismos?
A eso es a lo que se nos invita e impulsa pero por mucho que
digamos que eso es lo que queremos, comprometernos, alinearnos e integrar la
energía es un juego de pelota completamente nuevo.
Aceptémoslo, este no ha sido un período fácil para nadie,
comenzando a principios de los años noventa y acelerando a principios del año
2000. Mi vida ha tomado giros difíciles e inesperados durante ese período y se
que la de ustedes también. A veces he tratado tanto de hacer cambios pero la
oportunidad no era apropiada, las cosas no estaban bien, tenía otras cosas que
hacer de las que yo no estaba consciente y trabajo por hacer que me mantenía
firmemente afianzada en un sitio en el que no quería estar. Pero mis deseos no
parecían ser tan importantes como las tareas a mano y ésta ha sido nuestra
experiencia, hasta ahora.
Ahora no hay nada que nos retenga, excepto quizás el
descontento que proviene de habernos liberado de pronto después de un largo
período de confinamiento.
Puede llevar algún tiempo para que aprendamos a liberar las
misiones que han sido nuestro propósito de vida por tanto tiempo, pero ellas
están tan deseosas de liberarse de nosotros como nosotros de ellas. Todo está
buscando la transformación ahora, y probablemente no necesitamos preguntar de
que forma va a ocurrir la liberación ya que será muy obvio, en la forma de
situaciones y relaciones con las que ya no estamos alineados o con las que ya
no resonamos.
Nuestras manos y corazones tan acostumbrados a cargar con
pesadas cargas de sanación, ahora están libres para buscar otras avenidas.
¿Podemos dejar ir lo que sabemos ha sido nuestro propósito de vida y misión del
alma y permitirnos avanzar hacia un nuevo propósito que sirva a nuestra
alegría? El cambio está en el ambiente pero es la promesa de transformación, a
nivel del alma, la que constituye nuestro nuevo sendero.
Si vamos a estar alineados con la nueva energía, necesitamos
tener la voluntad de convertirnos en nuevas versiones de nosotros mismos, de
reconectar con el espectro total de nuestro poder que nos hemos negado en
servicio a nuestras misiones de sanación y esto requiere primero de
transformación, y entonces nuestra aceptación de los cambios que se derivarán
de ello.
¿Cómo se siente no ser un sanador en cada situación? ¿Qué
tipos de relaciones podemos tener si nuestra intención primaria es ser servidos
a nuestro nivel de servicio, recibir en igual medida en la que damos a los
demás? Esta es una de las cosas que debemos abordar al entrar en julio y en una
nueva fase de nuestro viaje de experiencia individual y colectivo.
Quienes han confiado en otros para que lleven la carga de su
dolor y sanación ahora tendrán que aprender a confiar en sí mismos. Quienes han
soportado y a veces estimulado este nivel de co-dependencia verán que no tienen
ni el tiempo ni la energía para hacerlo. El tiempo del Sanador Mártir terminó,
al igual que la era del Trabajador de la Luz.
Ahora somos Faros de Luz, haciendo que nuestra luz brille
desde nuestro espacio de alegría, paz, amor, compleción y abundancia para que
los demás puedan saber lo que significa vivir desde un lugar que está sano,
completo y total.
Somos mejores sanadores cuando le recordamos a los demás su
propio poder, en lugar de sentir pena por el dolor de ellos.
También somos mejores sanadores cuando estamos felices y
vivimos en alegría, en lugar de cuando sufrimos y luchamos con una energía que
no nos pertenece. La tierra y la humanidad no necesitan que les mostremos su
dolor, ellos necesitan saber que hay una alternativa y mirarán hacia nosotros
para que les mostremos el portal que deben atravesar por sí mismos.
Los temas de julio comienzan todos con la letra ‘E’ (en
Ingles, no en español), expandido, energizado, iluminado y evolucionado, donde:
• expandimos nuestra capacidad y voluntad de recibir y
sostener la energía a nuevos niveles de frecuencia y vibración,
• estamos energizados con nuestro nuevo propósito y misión y utilizamos la nueva energía para crear una nueva vida y forma de ser que nos sirva y que amamos,
• hacer brillar nuestra luz ‘iluminada’ brillantemente como faros de transformación inspirada para los demás, y
• evolucionamos hacia formas de ser nuevas y de frecuencia superior
• estamos energizados con nuestro nuevo propósito y misión y utilizamos la nueva energía para crear una nueva vida y forma de ser que nos sirva y que amamos,
• hacer brillar nuestra luz ‘iluminada’ brillantemente como faros de transformación inspirada para los demás, y
• evolucionamos hacia formas de ser nuevas y de frecuencia superior
También vamos a tener oportunidades para cumplir nuestros
sueños de una relación porque esta nueva energía requiere de asociaciones a
todos los niveles, y eso incluye la creación de relaciones amorosas,
edificantes, románticas con compañeros que son espíritus afines (no más
compañeros de alma o kármicos) y quienes también están dispuestos a compartir
relaciones que comienzan a un nivel igual de compleción y sanación. ¿Pudiera
haber algo mejor que eso?
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